SEGUNDAS OPORTUNIDADES

Después de mucho estudiar y estress por aproximadamente un mes sin dormir nada (y si digo nada no es en sentido figurado, es de verdad), por fin puedo decir que ayer salí de vacaciones de verano. Claro, si se le puede decir a tener solo Febrero para vacaciones.

lamentablemente mis planes originales se han ido al demonio. Los profesores, sin considerar lo irregular del semestre ni el cansancio a estas alturas del año académico, hicieron las últimas pruebas y los exámenes irrealizables!...consecuencias: me fui a dos exámenes, y en ambos parece que no me saqué el 44 esperado, así que a examen 2 para Marzo. Por lo mismo, y siendo un castigo autoimpuesto además de que tengo que estudiar para pasar los ramos si o si, he decidido no ir al mochileo con el Clan, quedarme por acá en Santiago y bueno, tratar de capear el calor. Así que solo a disfrutar del jamboree y algunos viajecillos a la playa.

Bueno...y a dormir harto!!!...que es lo que necesito!!!...

MUDANDO LA PIEL DE LA VIDA

Ya se termina una de las etapas más largas que me ha tocado, y también la más sufrida hasta el momento: mi vida como estudiante universitario.

Han sido largos años de lucha, de conocer nuevos mundos y nuevos conocimientos, reconocer el hecho de que los conocimientos más importantes no se encuentran en las aulas si no que en lo que uno aprende entregando los conocimientos o aportando con estos al sistema. Son muchas las pérdidades en el balance, pero también abundantes las ganancias.

lamentablemente esta última etapa me tocó vivirla de una manera media anormal: ya estamos a comienzos de enero y yo aún me encuentro en clases! bueno, es el pago por tener una educación pública de mejor calidad para las generaciones que vienen.

¿Planes? por el momento terminar los exámenes y obviamente pasar todo, y disfrutar del que se podría decir es mi último verano como estudiante. De hecho me siento como en el proceso que se observa en la imagen adjunta al presente texto: una especie de de estado intermedio entre el mochilero y el ejecutivo. Es como cuando las serpientes mudan la piel o como cuando algunos insectos pasan de su estado larval a uno distinto con otras funciones en la vida. Se dejan cosas que amas de lado, pero comienzas a amar otras. Cosas que en el momento actual de tu vida te llenan más.

En conclusión ¿qué queda? solo disfrutar estos momentos de estudio (o tratar de disfrutarlos) y comenzar a mentalizar la vida futura.